Con asombro y curiosidad, los habitantes de la céntrica ciudad mexicana de Puebla ven pasar por sus coloniales calles 35 taxis color rosa, cuyo uso y manejo está limitado a conductoras y pasajeras."La gente nos para por la calle para felicitarnos y las mujeres nos preguntan cómo pueden pedir una unidad", aseguró hoy a Efe Lidia Hernández, una de las taxistas de Pink Taxis, compañía que afirma ser la pionera en su ramo en el país.
Minutos después de pronunciar estas palabras, con el coche detenido en el Zócalo (plaza principal) de la ciudad de Puebla, capital del estado del mismo nombre, una señora se acerca y le da la enhorabuena: "es una fantástica iniciativa, ojalá haya pronto más unidades".
La inseguridad ha motivado en algunas zonas de México servicios de transporte sólo para mujeres para evitar incomodidades, perjuicios y en algunas ocasiones abusos físicos.
En la ciudad de México desde hace el pasado año existen autobuses sólo para mujeres mientras que son mucho más antiguos los vagones del Metro de la capital que han sido reservados en hora punta sólo para ellas.
De momento, la Secretaría de Comunicaciones y Transporte de Puebla ha invertido en ellos 5.6 millones de pesos (unos 430 mil dólares.
"Todos los coches están equipados con un sistema de localización GPS, con un botón de pánico (conectado a un centro de emergencia) y tienen terminales bancarias para evitar el uso de dinero en efectivo y dar más seguridad", explicó Eduardo del Castillo, director de Pink Taxis.
Su funcionamiento y tarifas son como las de los taxis ordinarios, aunque en un futuro se calcula que podrían valer en torno a 10% más que los taxis tradicionales.
Sólo los diferencia del resto de medios de transporte el hecho de que están prohibidos los hombres a bordo y que sólo admiten mujeres y niños.
Además de seguridad, los Pink Taxis están adaptados para que las mujeres se sientan cómodas a bordo.
"Todos los taxis cuentan con un espejo frente al asiento trasero en el que pueden maquillar y en un futuro se estudia poner otros artículos de uso femenino", explicó Humberto Vargas, director Comercial de Pink Taxis.
"En Colombia se usa (este tipo de transporte) por seguridad y en países árabes como Dubai por motivos culturales porque las mujeres no pueden subir en un coche con un hombre que no sea su esposo", explicó el directivo.
Puesto que no había suficientes mujeres taxistas en Puebla, las autoridades locales tuvieron que capacitar conductoras para este trabajo.
"Aprendieron cómo cambiar una rueda, cómo revisar el motor, así como conocimientos básicos de primeros auxilios", explicó Vargas.
"Hay algunos hombres que nos insultan, sobre todo los taxistas y los conductores de transporte público cuando hacemos algún cambio de carril, pero algunos otros también nos dicen piropos", explicó la conductora Matilde González, quien nunca antes había trabajado como taxista.
"Muchos hombres creen que conducimos peor y dicen aquello de `mujer al volante peligro constante`, pero hay hombres que conducen peor que nosotras y ahora se lo vamos a demostrar", aseguró.
"Una se siente satisfecha cuando, por ejemplo, las mamás nos dicen que están más seguras de que una mujer lleve a sus hijas a casa cuando salen por la noche a divertirse", relató González.
En opinión de los directivos de Pink Taxis, la iniciativa ha tenido tanto éxito en la ciudad de Puebla que se estudia la posibilidad de repetirla en otras ciudades de este céntrico estado e incluso en otros lugares de la República mexicana.